¿Patentar o no un proceso o un producto?

En estos días estamos tratando con la patente de un producto que nos han traído unos argentinos y que, creemos, puede ser un negocio interesante para DAD. Está ya claro que el proceso es costoso y lento. Primero hay que asegurarse que lo que quieres patentar es posible hacerlo. Tiene que ser novedoso, no infringir patentes ya existentes y, a ser posible, tener aplicación a nivel mundial. Ya os iré explicando lo que pasa y cuanto cuesta para que podáis tenerlo presente la próxima vez que lo necesitéis. De momento, estamos analizando posibles competidores y viendo donde hacemos las patentes aparte de en España.


Compartir en :


Noticias relacionadas




Comentarios