La guerra de patentes no descansa en el sector de la telefonía móvil. Y a diferencia de las habituales escaramuzas comerciales, la de Apple contra HTC ha llegado a los tribunales de arbitraje antes de que las dos empresas alcancen un acuerdo.
La decisión preliminar del juez de la ITC (la Comisión Internacional de Comercio, una agencia dependiente de la Organización Mundial del Comercio) acepta dos de la docena de reclamaciones de Apple, asestando un golpe a las acciones de HTC a falta de que el panel en pleno de la Comisión decida sobre el asunto.
La taiwanesa HTC, que fabrica muchos de los modelos estrella de Android y que colaboró en el diseño del primer teléfono de Google, el Nexus One, ha adelantado que apelará la decisión. El proceso podría llevar a que Estados Unidos bloqueara la importación de varios dispositivos de HTC.
Las patentes, al parecer registradas en los noventa y mucho antes de que los teléfonos inteligentes fueran cosa cotidiana, se refieren a la transmisión e identificación de datos, y entran en juego por ejemplo en los servicios de correo electrónico.
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