Esta semana llegará a las tiendas australianas la tableta Galaxy Tab de Samsung, después de que el viernes pasado un juez de Sydney negara a Apple la posibilidad de recurrir ante el Tribunal Supremo la prohibición de venderla.
Recordemos que Apple ha demandado en diferentes países a la compañía surcoreana por un supuesto plagio de su iPad. En Alemania consiguió frenar su venta, y Samsung deberá modificar el nombre y algunas características de la tableta para venderla.
El caso es que lejos de sentirse molesta por estas demandas, parece que Samsung agradece a Apple la promoción que está logrando. Por un lado, su nombre se repite gratis en los medios de comunicación; y por otro, Apple parece dar a entender que sí hay rivales para su iPad, y muy preocupantes.
Así opina Tyler McGee, vicepresidente de Samsung Australia, que en una entrevista en el Sydney Morning Herald se muestra contento como unas castañuelas por “el favor” que le ha hecho Apple con sus denuncias.
“La atención mediática ha hecho del Galaxy Tab 10.1 un nombre conocido, comparado con lo que habríamos conseguido con la inversión desde la perspectiva del marketing”, explica McGee.
El directivo no aclaró cuántas unidades de la tableta tienen previsto vender en Australia, pero señaló que probablemente “haya escasez de suministros”.
Noticias relacionadas
-
¿España?: El país de nadie es profeta en su tierra.
-
¿Será 2019 un buen año para vender tu empresa?
-
Por qué la experiencia del cliente se ha convertido en una prioridad para los CIOs