Hacer la transición de fundador a CEO no es sencilla. Quizás la frase más interesante del artículo es la que explica que, como fundador tienes máximo foco en el producto/servicio y en el cliente, mientras que, cuando eres un verdadero CEO lo que quieres es liderar la mejor empresa del mundo en tu sector.
En la transición tienes que pasar el cuerpo a cuerpo de uno en uno al liderazgo corporativo y saber, más que hacer –algo clave como fundador al inicio– delegar y mantener equipos motivados que resuelven los problemas con un seguimiento cercano, feed back sobre su ejecución y motivación de grupo.
Otro de los aspectos que cambian dramáticamente tienen que ver con las relaciones y como darles prioridad. Un CEO tiene que dedicarle mucho tiempo a su equipo directivo y a los demás miembros de su Consejo de Administración para conseguir que todos estén alineados con su visión del negocio y de su futuro.
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