Gates fue mucho menos generoso en 2001

La crisis que ha sacudido al sector tecnológico durante el año que ha acabado hace unos días, también ha afectado de manera alarmante al espíritu dadivoso de sus principales multimillonarios.

Según la Crónica de Filantropía estadounidense, que se elabora anualmente, entre los diez principales filántropos de este país en 2001, apenas hay tres que procedan del mundo tecnológico. Además, las suma de las donaciones de esta decena de prohombres ha caído más de la mitad, desde los 11.070 millones de dólares de 2000 a los 4.600 del pasado año.

Bill Gates sigue ocupando la medalla de oro de esta competición tan especial con 2.000 millones de dólares de su fortuna personal dedicados a obras de caridad. La mala noticia es que en 2000, año en el que también ocupó el primer puesto, llegó a donar 5.000 millones.

En 2000 la medalla de lata también pertenecía a un habitante de Silicon Valley, pero en 2001 hay que acudir al cuarto puesto para encontrar a otro pez gordo de la tecnología. Se trata de Gordon Moore, uno de los fundadores de Intel conocido por su ley de crecimiento tecnológico, que ocupa el tercer puesto con 300 millones de dólares. El cuarto lugar es para Bill Coleman, fundador de BEA Systems, con 250 millones.