Hay muchos atractivos que convergen en la Expo E3 de Los Angeles, la feria en la que los juegos se convierten en negocios. Incluidas las llamativas azafatas, que no acaban de ser desterradas como reclamo a pesar del revuelo armado en anteriores ediciones, aunque ahora circulan un tanto más recatadas. Uno de ellos es la nueva consola presentada por Nintendo, Wii, que aspira a convertirse en un fenómeno de masas tanto por su precio (se especula con que estará en torno a los 200 dólares, sensiblemente inferior al de sus competidoras Xbox 360 de Microsoft y PS3 de Sony), como por sus innovadoras prestaciones.
Claro que los participantes en esta feria se comportan como los partidos políticos tras unas elecciones: se diría que todos ganan. Microsoft saca pecho porque su consola salió antes al mercado y estará instalada en diez millones de hogares a finales de año, cuando se empiecen a vender las otras dos. Por su parte, Sony, que pondrá la PS3 en las tiendas el 17 de noviembre, cree que los 500 dólares del precio no serán obstáculo para liderar el mercado, ya que se compensarán con el disco duro de 60 Gbs y el reproductor Blu-Ray que incorporarán. Pues nada, todos a jugar para darles la razón a los tres. Más
Noticias relacionadas
-
¿España?: El país de nadie es profeta en su tierra.
-
¿Será 2019 un buen año para vender tu empresa?
-
Por qué la experiencia del cliente se ha convertido en una prioridad para los CIOs