Los creadores de Call of Duty se lo montan por su cuenta

El mes pasado, Activision Blizzard despidió de repente a los creadores del videojuego \”Call of Duty\”, acusados de insubordinación. Ellos respondieron con una demanda, exigiendo la propiedad intelectual de parte de los juegos y afirmando que les habían despedido para no pagarles una suculenta ración de derechos de autor.

La productora no se quedó atrás y les demandó a ellos afirmando que habían negociado con la competencia estando bajo contrato y frenado el desarrollo de los juegos a propósito, además de pintarles como a un par de villanos codiciosos.

Con tanto lío, casi sorprende que los dos diseñadores hayan sacado tiempo entre demanda y demanda para montar un nuevo estudio, Respawn Entertainment, y firmar con Electronic Arts, que les ha suministrado millones de dólares -en plural- para montar el chiringuito a cambio de los derechos de distribución en exclusiva de su próximo juego.

Puede que se estén vengando pasándose a la competencia de su antiguo dueño, pero han aprendido la lección y conservarán la propiedad intelectual de sus juegos a partir de ahora.

El desarrollo de videojuegos es lento, así que no habrá producto de Respawn hasta dentro de dos o tres años. Sus creadores ya están pensando en las adaptaciones a cómic o a cine. Y es que no se acostumbra a pensar a lo grande después de crear una franquicia que ha ingresado unos 3.000 millones de dólares en todo el mundo.

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