El boyante fabricante de teléfonos móviles finlandesa ha aguantado el tipo este último trimestre fiscal, pese a la situación del sector. Nokia, al contrario que su archirival Ericsson, ha visto incrementarse en un 35% la de productos para redes y en un 20% la venta de celulares, alcanzando un 31,3% de la cuota de mercado, y frustrando su ambicioso objetivo inicial de hacerse con el 40%.
Los beneficios, previos a impuestos, de la compañía fueron de 1.410 millones de euros (1.250 millones de dólares), algo por encima de lo estimado por los analistas. Las ventas netas alcanzaron los 8.000 millones de euros, frente a los 6.540 del mismo periodo del año anterior. Pero no todo iban a ser buenas noticias, y Nokia ha tenido que reconocer que la creciente competencia y el ambiente general la está afectando, y que durante el próximo periodo fiscal sólo espera un crecimiento del 20% en las ventas, en vez del 25-30% inicial.
- En Financial Times
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