A la hora de dar el paso para lanzarse al mundo emprendedor, hay que tener en cuenta diversos detalles para construir un buen entramado empresarial. Una red de contactos sólida hará más sencillo dar forma a las ideas preconcebidas. Es lo que se llama Networking.
Networking es el arte de construir nuestra red de contactos. No solo es conocer gente o salir a eventos, sino que se trata de trabajar bien esos contactos que hemos ido conociendo y organizarlos de una forma que sepamos de un simple vistazo localizar a un cliente determinado y saber cuál es su trabajo.
Una buena gestión de los contactos comienza con la gente que tenemos alrededor. No hay que obsesionarse con buscar nuevos, si ya conocemos aquellos que nos pueden ayudar desde un primer momento. Ya llegará ese instante. Hay que encontrar rápidamente a quién necesitamos para las diferentes tareas.
Todos tenemos seguro una o varias cuentas en las redes sociales. En pleno 2015 son fundamentales alimentarlas con unos contactos que de verdad nos sean útiles. Hay muchas redes, pero os recomendamos tres: Facebook, Twitter y, sobre todo, LinkedIn.
Nos vamos a centrar en esta última por motivos obvios: está orientada al mundo profesional y podemos conocer las actitudes de cada contacto que hemos conocido si la persona en cuestión ha rellenado correctamente su perfil. Precisamente vamos a comenzar por el perfil a daros unos consejos. Es costumbre, al igual que al realizar nuestro currículo, escribir nuestros estudios y el nombre de las diferentes empresas que hemos trabajado. Esto no está de más, pero para comenzar a hacer Networking correctamente el objetivo principal es saber venderse a uno mismo. De nada vale escribir el centro educativo y los estudios personales si no se destacan de otros perfiles. Hay que subrayar los logros conseguidos y completar el perfil con ellos.
Una vez que se finalice de rellenar todos los datos que pide LinkedIn, se comienza la inserción de los contactos que ya tengamos localizados o buscar los nuevos. Es recomendable crear diferentes categorías y etiquetas para recordar quién es quién y tenerlos organizados de manera efectiva y, en definitiva, útil.
Si la startup crece y, en consecuencia, también la lista de contactos, el siguiente paso a dar es el de hacerse con un CRM (Customer Relationship Management), un software de gestión de empresas y clientes. Con él la efectividad a la hora de manejar grandes datos aumenta, y no hay que tener miedo por su precio, puesto que hay empresas que ofrecen esta solución de manera gratuita.
A la hora de moverse a la hora de buscar contactos, ya sea en eventos propios de Networking como en actos empresariales, hay que intentar ser en todo momento originales. Hay que cuidar el discurso ofrecido, siempre conociendo a nuestro interlocutor, sacando temas que aunque no vengan al caso, pueden ser útiles para afianzar la relación. Obviamente, la forma de vestir dice mucho de la empresa a la que representas, tu startup. La presentación debe de ser la adecuada dependiendo del producto que se venda. No hace falta que siempre se acuda con traje y corbata (que en la mayoría de las ocasiones es lo más lógico). Se puede ir, por ejemplo, con alguna prenda que desprenda espíritu deportivo si la startup creada se dedica precisamente a deportes.
Estos consejos los ha facilitado Félix López Capel, emprendedor, fundador de Conectando Empresas y director de SEK Lab, en el marco incomparable de la South Summit 15 de Madrid.
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