Uno de los rumores que sonaban durante el E3 de 2016 era un stick HDMI de Microsoft para llevar mediante tecnología streaming la imagen de una Xbox One a cualquier pantalla o monitor sin tener que cargar con la consola y sin depender de un equipo Windows 10.
De repente el proyecto dejó de sonar en las quinielas de nuevos productos de los de Redmond, y ahora se ha conocido, vía Windows Central, el motivo por el que no se ha escuchado desde el E3. Según lo comentado por la web, Microsoft tenía efectivamente previsto la presentación del stick durante la feria de Los Ángeles. Sin embargo, Sony apretó las cuerdas con su PlayStation 4 Pro (proyecto Neo) y propició el cambio del plan inicial, sustiyéndolo por el anuncio de Xbox One S, el modelo slim de su última consola, y Xbox Scorpio, la poderosa máquina prevista para el 2017.
El funcionamiento del stick era similar al Chromecast de Google. Se iba a conectar a través del puerto HDMI de la televisión o de un monitor y mediante la conexión wifi, el dispositivo emitiría la señal de la consola, pudiendo jugar en otra habitación del hogar distinta a donde se encuentra instalada la Xbox One.
Microsoft no ha declarado nada al respecto, por lo que el proyecto podría resurgir en cualquier momento, quizá con la llegada de la Scorpio el año que viene.
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